Hola, soy Sandra Cuchy y te quiero contar cómo nació mi marca de sandalias joya, porque detrás de cada par hay mucha historia, mucho corazón y también muchos tropiezos.
Todo empezó en un viaje a Grecia. Era la primera vez que iba y fue amor a primera vista: su historia, su cultura, sus islas… me atraparon. Y como siempre que viajo, no solo descanso: también estoy con el radar activado, porque llevo más de 20 años en el mundo de la moda y siempre mezclo placer con trabajo.
Ahí encontré una fábrica de sandalias que me hizo clic. Y me dije: “¿Y si traigo esta esencia griega a España, pero a mi manera?”. Así nació la idea de hacer sandalias joya, algo que no existía como tal. Quería fusionar lo artesanal con el diseño, y darle un toque de joyería para que no fueran solo cómodas, sino también especiales.
¿Por qué se llama Cuchy?
Porque es mi apellido, y lo llevo con muchísimo orgullo. Mi abuelo fue un emprendedor nato, mi padre también lo fue en su mundo, y aunque yo decidí tomar otro camino, sentía que tenía que llevar ese nombre en alto. Desde pequeña tenía claro que lo mío era la moda. Trabajé muchos años como comercial y cuando sentí que era el momento, me lancé a crear algo propio.
¿Y cuál fue ese momento?
Lo recuerdo perfecto: agosto de 2019, en Sifnos (una isla griega que me tiene enamorada). Ahí me dije: “Este es el sueño que quiero cumplir”. Y no tardé mucho en empezar.
Eso sí, empecé en plena pandemia, lo que no fue nada fácil. Todo cerrado, todo incierto… y yo montando una marca desde cero. Al principio me equivoqué muchísimo, sobre todo en lo digital (yo venía del comercio físico y no tenía ni idea de webs, redes, campañas…). Pero fui aprendiendo sobre la marcha, y poco a poco armé un equipo que hoy es clave.
Los primeros prototipos eran preciosos pero con muchas mejoras que ir implementando. En Grecia por ejemplo sólo conocen la sandalia plana e ir construyendo una colección mas amplia para distintas alturas y con distintos materiales ha sido un trabajo muy grande.
¿Qué hace diferente a Cuchy?
Cuchy son sandalias joya artesanales, hechas en Grecia, con diseño único y producciones pequeñas. No fabricamos en masa. Lo hacemos con calma, con mimo, con materiales buenos. Porque no quiero que las lleves una vez y ya. Quiero que te duren y que te acompañen año tras año.
La joyería que acompaña a nuestro calzado es muy especial, nosotras mismas fabricamos los moldes y bañamos las joyas en oro de 24 KT. Transformando nuestros diseños en piezas únicas.
Y eso es lo que más me emociona: cuando me escribís diciendo que os pararon en la calle a preguntaros por las sandalias o que vuestras amigas se morían de envidia… eso me hace saber que vamos por el buen camino.
¿Fue fácil? No. ¿Valió la pena? Mil veces sí.
He tenido problemas con fábricas, con copias y también he tenido que aguantar comentarios feos en redes. Pero nada de eso me ha frenado. Porque esto es mi proyecto de vida. Me han ofrecido salidas, pero yo quiero estar aquí. Esto es lo que amo hacer.
En estos 5 años hemos crecido mucho, hemos acaparado la atención del público, de referentes en el mundo de la moda y tenemos una comunidad de 130.000 personas en Instagram que nos elige por delante de otros y se sienten muy especiales luciendo nuestras creaciones.
¿Qué aprendí?
A confiar en los demás, a trabajar en equipo, a dejarme ayudar. Que no puedo con todo. Que también hay que cuidar la vida personal, porque si no, te pasa factura. Y que todo llega cuando tiene que llegar. Ni antes ni después.
Y si estás pensando en emprender…
Hazlo. No será fácil, pero si lo sientes de verdad, lánzate. Rodéate bien, busca apoyo y no tengas miedo de equivocarte. Porque eso también forma parte del camino.
Si pudiera hablar con la Sandra de 2019, le diría:
“Lo hiciste con el corazón, y eso ya es un éxito”.
Gracias por leerme, por confiar en Cuchy, y por formar parte de este sueño.
— Sandra
